Inseguridad ciudadana en Arequipa: Un problema que requiere soluciones integrales

La inseguridad en Arequipa ha llegado a un punto crítico. Recientemente, una madre de familia notificó a la comisaría de Acequia Alta en el distrito de Cayma, el robo de las pertenencias en su domicilio y a la vez el robo de su vehículo a manos de una banda de delincuentes que ya se encontrarían activos hace bastante tiempo. 

Hechos como este han  sucedido en ocasiones anteriores llevando a las autoridades a declarar el Estado de Emergencia en la provincia. Esta medida, reflejada en el Decreto Supremo N.º 043-2024-PCM, es una respuesta a la creciente ola de delitos violentos y robos que han sembrado el temor en la población. Sin embargo, esta medida no basta, se necesita una estrategia coordinada y una implementación efectiva para lograr resultados sostenibles.

Hasta junio de este año y según el informe “Estadísticas de seguridad ciudadana” del INEI la región más insegura del Perú vendría a ser Arequipa, dado que el 38.6% de la población arriba de los 15 años de edad fue víctima de algún hecho delictivo.

Declaratoria de Emergencia: Medida necesaria pero insuficiente

La declaratoria de emergencia permite a la Policía Nacional del Perú (PNP) actuar con mayor flexibilidad y utilizar recursos adicionales con el apoyo de las Fuerzas Armadas (FF. AA.). Durante el primer día del Estado de Emergencia, la PNP detuvo a 15 individuos con órdenes de captura pendientes. Aunque estas acciones son un paso en la dirección correcta, la realidad es que los esfuerzos aislados no serán suficientes para erradicar la delincuencia.

Medidas de la PNP y los alcaldes: Una respuesta Incompleta

La PNP ha intensificado sus operativos, incrementando la presencia policial en las zonas más conflictivas y realizando intervenciones más frecuentes. Estas acciones iniciales han tenido un impacto positivo, con una disminución en algunos tipos de delitos y la captura de varios delincuentes. Sin embargo, los resultados no han sido los esperados a largo plazo.

La solicitud de una ampliación de 30 días más para el Estado de Emergencia por parte de un alcalde refleja la necesidad de tiempo adicional para que la PNP pueda combatir eficazmente a las bandas de crimen organizado.

Resultados y situación actual: Una imagen mixta

A pesar de los esfuerzos, la sensación de inseguridad persiste en Arequipa. Las estadísticas muestran una disminución en ciertos delitos, pero un aumento en otros, especialmente en los delitos contra la vida, el cuerpo y la salud, que incluyen homicidios y feminicidios. Las críticas hacia los alcaldes son severas, acusándolos de falta de liderazgo y gestión ineficaz.

La falta de coordinación y estrategia integral: El verdadero problema

El especialista Carlos Montes de Oca advierte que Arequipa carece de una política criminal que permita una reacción organizada del Estado y la sociedad civil frente a las acciones delictuosas. 

La crisis política y la inestabilidad en el mandato agravan la situación, impidiendo la implementación de medidas de protección eficaces.

La necesidad de un enfoque integral

La inseguridad en Arequipa requiere un enfoque multifacético y un compromiso real de todas las autoridades involucradas. No basta con declaratorias de emergencia o medidas aisladas; es imprescindible un plan integral que aborde tanto la prevención del delito como sus causas subyacentes. Los alcaldes deben asumir un rol más proactivo y coordinado, trabajando en conjunto con la PNP y la comunidad para devolver la tranquilidad a la ciudad. Solo así se podrá revertir la espiral de inseguridad que afecta a Arequipa y garantizar un entorno seguro para todos sus habitantes.