Congreso postergó aprobación de la Ley de Masificación del Gas Natural que beneficiará a cientos de familias

El Congreso de la República ha decidido postergar la aprobación por insistencia de la Ley 679 de Masificación del Gas Natural, lo que ha generado diversos cuestionamientos por parte de analistas preocupados por posibles distorsiones en la ley.

La mencionada ley fue aprobada el 14 de noviembre de 2023 sin votos en contra. Sin embargo, el Poder Ejecutivo observó la ley, principalmente debido a su propuesta de cambiar el tope del subsidio incluido en la misma. Mientras que la versión aprobada establecía un tope de 50,000m3 de gas al mes para el subsidio, el Ejecutivo propuso elevar este límite a 900,000m3 al mes.

Según José Ignacio Beteta, presidente de la Asociación de Contribuyentes del Perú, aquellos que abogan por un tope de 900,000m3 buscan aumentar el volumen de gas comercializado por las concesionarias actuales, lo que les proporcionaría mayores ingresos para invertir en infraestructura y expansión de redes. Sin embargo, Beteta argumenta que la realidad contradice esta idea, ya que la expansión de redes está mayormente a cargo del FISE, y el aumento de ingresos de las concesionarias solo obstaculizaría la creación de un mercado competitivo y transparente.

Por otro lado, César Gutiérrez, expresidente de Petroperú y especialista en el sector energético, sostiene que el subsidio debe beneficiar a los usuarios de gas natural con consumos menores, hasta 50,000m3 mensuales, ya que representan la gran mayoría de los usuarios a nivel nacional. Gutiérrez argumenta que dirigir el subsidio a grandes industrias no necesitadas solo obstaculizaría el acceso al gas natural para los hogares, comercios y pequeñas empresas.

Los defensores de un subsidio más amplio argumentan que esto permitiría a las concesionarias aumentar sus ingresos y mejorar la infraestructura, lo que eventualmente beneficiaría a los usuarios mediante tarifas más bajas. Sin embargo, hay quienes cuestionan esta idea, argumentando que priorizar a las grandes industrias podría socavar el acceso equitativo al gas natural y afectar el desarrollo regional fuera de Lima.